Proceso de potabilización
Proceso de potabilización
A pesar de la definición química del agua como una sustancia constituida exclusivamente por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno, en la naturaleza no se encuentra nunca en ese grado de pureza, sino que está siempre impurificada con una serie de componentes inorgánicos y orgánicos.
Captación
La fuente de provisión de agua a nuestra ciudad, se halla en proximidades de la ciudad de Sarmiento. El agua es captada en el Lago Musters, a 6 km. de Sarmiento, mediante dos tuberías de 900 mm. y 1.300 mm de diámetro. El extremo de succión se encuentra a 200 m. de la orilla, ingresando el líquido en dos cámaras de carga desde donde es bombeada con electrobombas hasta las piletas desarenadoras, ubicadas a 380 m. de las salas de bombas.
Secuencia de operaciones físicas y químicas de potabilización de nuestra agua de consumo
El agua del lago, al igual que la mayoría de las aguas de origen superficial es turbia y coloreada.
La turbiedad puede provenir de diferentes clases de materia en suspensión como: arena fina, arcilla, limo, microorganismos, etc., por lo que el tratamiento adecuado para eliminarla depende de esas características.
El color proviene de partículas de materia orgánica provenientes de la maceración de hojas, cortezas y otras sustancias vegetales en descomposición.
La turbiedad del agua del lago proviene de partículas relativamente grandes en menor escala y en su casi totalidad de partículas en suspensión extremadamente pequeñas (llamadas coloidales).
Las partículas que le confieren color también son coloidales. Estas características demandan el siguiente tratamiento al agua.
Desarenado
Primera etapa de potabilización en inmediaciones del lago. Las partículas relativamente grandes (arena, tierra) son sedimentadas por reposo del agua. Van hacia el fondo clarificando el agua.
Las piletas desarenadoras se encuentran a unos 380 m. del lago. El agua llega a ellas por impulsión desde las bombas en orillas del lago.
En estas piletas se hace el agregado de hipoclorito de calcio para eliminar las algas en los meses más críticos, primavera y verano, evitando que las mismas lleguen a reproducirse en la gran superficie de los desarenadores y se complique su total eliminación en las posteriores unidades de tratamiento.
El tiempo de residencia del líquido es de aproximadamente una hora y media, siendo conducido luego por gravedad hasta el establecimiento de potabilización, que se encuentra en la ciudad de Sarmiento, a unos 6 km. de distancia.
Floculación – Decantación del agua
En su ingreso a las plantas, el agua es dirigida desde dos cámaras equipartidoras de caudales a 8 y 6 unidades de floculación – decantación respectivamente. En la parte anterior de estas piletas, en el floculador provisto de paletas giratorias, se agrega una sustancia química llamada coagulante (sulfato de aluminio) que tiene la propiedad de aglomerar las partículas coloidales, no separadas por el desarenado, formando coágulos fáciles de eliminar por decantación por su mayor consistencia.
El movimiento de las paletas de los floculadores ayuda a la reacción producto químico – agua.
Para tratar aguas muy turbias, en las épocas de crecientes de los ríos, se agrega junto al coagulante un polielectrolito (productos orgánicos de peso molecular elevado).
Luego de aproximadamente media hora de residencia, el agua clarificada sale por los canales periféricos hacia una sala de bombas que la envía a las unidades de filtración.
Filtración
Todas las aguas provenientes de captaciones superficiales deben ser sometidas a filtración para poder considerarlas en condiciones de absoluta potabilidad. Mediante la filtración se eliminan del agua las materias en suspensión y restos de productos químicos no decantados, consiguiéndose este objetivo mediante el pasaje de la misma a través de un manto poroso, constituido por piedras clarificadas y arena.
Junto con las partículas de turbiedad, el agua puede contener microorganismos de origen animal o vegetal que llegan vivos al manto filtrante y ayudados por sus propios movimientos, pueden atravesarlo, debiendo encararse su eliminación por una desinfección.
Desinfección
Con la coagulación (sedimentación) y filtración del agua se elimina el 99% de las bacterias presentes en el agua. La cantidad remanente después de estos procesos no permite que el agua sea bebida sin riesgos para la salud. Por ello es imprescindible desinfectar el agua antes de librarla para el consumidor.
La desinfección no elimina todas las bacterias del agua, pero sí aquellas que son potencialmente peligrosas. La eliminación total, o sea, la esterilización del agua es innecesaria.
Puede hacerse la desinfección por medio de agentes químicos y físicos:
Químicos: cloro y sus derivados (hipoclorito de calcio, sodio) y ozono.
Físicos: calor – rayos ultravioletas.
Controles para determinar la potabilidad del agua
Se analiza con frecuencia el agua para conocer en todo momento la composición química y el estado microbiológico del agua distribuida.
En el laboratorio se analizan las características físicas (color, sabor y turbiedad) y químicas (contenido de diversas sales, dureza de un agua, contenido de cloro residual, alcalinidad, acidez)
El examen microbiológico del agua es necesario para poder establecer la presencia o ausencia de toda clase de bacterias de carácter patógeno responsables de las enfermedades hídricas (tifoidea, cólera, etc.), que llegan a través de agua de las descargas intestinales de las personas enfermas.
Normas de calidad para el agua potable
El Código Alimentario Nacional es el que establece los límites permisibles en un agua potable.
A pesar de la definición química del agua como una sustancia constituida exclusivamente por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno, en la naturaleza no se encuentra nunca en ese grado de pureza, sino que está siempre impurificada con una serie de componentes inorgánicos y orgánicos.
Captación
La fuente de provisión de agua a nuestra ciudad, se halla en proximidades de la ciudad de Sarmiento. El agua es captada en el Lago Musters, a 6 km. de Sarmiento, mediante dos tuberías de 900 mm. y 1.300 mm de diámetro. El extremo de succión se encuentra a 200 m. de la orilla, ingresando el líquido en dos cámaras de carga desde donde es bombeada con electrobombas hasta las piletas desarenadoras, ubicadas a 380 m. de las salas de bombas.
Secuencia de operaciones físicas y químicas de potabilización de nuestra agua de consumo
El agua del lago, al igual que la mayoría de las aguas de origen superficial es turbia y coloreada.
La turbiedad puede provenir de diferentes clases de materia en suspensión como: arena fina, arcilla, limo, microorganismos, etc., por lo que el tratamiento adecuado para eliminarla depende de esas características.
El color proviene de partículas de materia orgánica provenientes de la maceración de hojas, cortezas y otras sustancias vegetales en descomposición.
La turbiedad del agua del lago proviene de partículas relativamente grandes en menor escala y en su casi totalidad de partículas en suspensión extremadamente pequeñas (llamadas coloidales).
Las partículas que le confieren color también son coloidales. Estas características demandan el siguiente tratamiento al agua.
Desarenado
Primera etapa de potabilización en inmediaciones del lago. Las partículas relativamente grandes (arena, tierra) son sedimentadas por reposo del agua. Van hacia el fondo clarificando el agua.
Las piletas desarenadoras se encuentran a unos 380 m. del lago. El agua llega a ellas por impulsión desde las bombas en orillas del lago.
En estas piletas se hace el agregado de hipoclorito de calcio para eliminar las algas en los meses más críticos, primavera y verano, evitando que las mismas lleguen a reproducirse en la gran superficie de los desarenadores y se complique su total eliminación en las posteriores unidades de tratamiento.
El tiempo de residencia del líquido es de aproximadamente una hora y media, siendo conducido luego por gravedad hasta el establecimiento de potabilización, que se encuentra en la ciudad de Sarmiento, a unos 6 km. de distancia.
Floculación – Decantación del agua
En su ingreso a las plantas, el agua es dirigida desde dos cámaras equipartidoras de caudales a 8 y 6 unidades de floculación – decantación respectivamente. En la parte anterior de estas piletas, en el floculador provisto de paletas giratorias, se agrega una sustancia química llamada coagulante (sulfato de aluminio) que tiene la propiedad de aglomerar las partículas coloidales, no separadas por el desarenado, formando coágulos fáciles de eliminar por decantación por su mayor consistencia.
El movimiento de las paletas de los floculadores ayuda a la reacción producto químico – agua.
Para tratar aguas muy turbias, en las épocas de crecientes de los ríos, se agrega junto al coagulante un polielectrolito (productos orgánicos de peso molecular elevado).
Luego de aproximadamente media hora de residencia, el agua clarificada sale por los canales periféricos hacia una sala de bombas que la envía a las unidades de filtración.
Filtración
Todas las aguas provenientes de captaciones superficiales deben ser sometidas a filtración para poder considerarlas en condiciones de absoluta potabilidad. Mediante la filtración se eliminan del agua las materias en suspensión y restos de productos químicos no decantados, consiguiéndose este objetivo mediante el pasaje de la misma a través de un manto poroso, constituido por piedras clarificadas y arena.
Junto con las partículas de turbiedad, el agua puede contener microorganismos de origen animal o vegetal que llegan vivos al manto filtrante y ayudados por sus propios movimientos, pueden atravesarlo, debiendo encararse su eliminación por una desinfección.
Desinfección
Con la coagulación (sedimentación) y filtración del agua se elimina el 99% de las bacterias presentes en el agua. La cantidad remanente después de estos procesos no permite que el agua sea bebida sin riesgos para la salud. Por ello es imprescindible desinfectar el agua antes de librarla para el consumidor.
La desinfección no elimina todas las bacterias del agua, pero sí aquellas que son potencialmente peligrosas. La eliminación total, o sea, la esterilización del agua es innecesaria.
Puede hacerse la desinfección por medio de agentes químicos y físicos:
Químicos: cloro y sus derivados (hipoclorito de calcio, sodio) y ozono.
Físicos: calor – rayos ultravioletas.
Controles para determinar la potabilidad del agua
Se analiza con frecuencia el agua para conocer en todo momento la composición química y el estado microbiológico del agua distribuida.
En el laboratorio se analizan las características físicas (color, sabor y turbiedad) y químicas (contenido de diversas sales, dureza de un agua, contenido de cloro residual, alcalinidad, acidez)
El examen microbiológico del agua es necesario para poder establecer la presencia o ausencia de toda clase de bacterias de carácter patógeno responsables de las enfermedades hídricas (tifoidea, cólera, etc.), que llegan a través de agua de las descargas intestinales de las personas enfermas.
Normas de calidad para el agua potable
El Código Alimentario Nacional es el que establece los límites permisibles en un agua potable.
